Review Summary: Emulación de bandas no implica que tu música es buena
Cuando se busca una observación objetiva de cualquier objeto de estudio, se busca primordialmente una visión que no esté de algún modo polarizada por estigmas de cualquier naturaleza, ya sea un odio natural (o bien influenciado por el medio) contra cierto tipo de música por su contenido, origen, género o razón social.
Decidĩ escuchar a Porter por que al parecer es una banda interesante, o al menos que moja las pantaletas de las jovencitas rockeras que escuchan el buen “indie” local. Asĩ que pensé “claro por qué no”, asĩ que decidĩ empezar por su primer EP, llamado
Donde los Ponys Pastan.
Lo que ocurre al escuchar a Porter varĩa dependiendo de la edad, grado de conocimiento de música internacional, géneros, música actual y música con algunos años de haberse comercializado. Si bien suena “fresco” para algunos, no es por que en verdad sea música fresca.
Au contraire de lo que pueda pensar la nueva ola de mocosos cuyo conocimiento de música es de
Nirvana para acá, lo que presenta Porter no es música fresca, es una astuta mezcla de géneros que están ahĩ, afuera, esperando ser descubiertos, que sin embargo son ligeramente más inaccesibles que estos jóvenes amantes del “indie”.
Espiral, considerablemente su sencillo más conocido, tiene influencias marcadamente imponentes de bandas como
Modest Mouse,
Blur (en sus momentos más apacibles), y otras como
The Cure[L], [L]Placebo,
Pixies,
Fobia e incluso sus compatriotas
Zoé, que son fuertemente reconocibles debido a que no son usadas como influencias, sino que son meramente copias del sonido de las bandas anteriormente mencionadas (en mayor o menor proporción). El más risible de los ejemplos es la parte donde el cantante imita el timbre particular de Saúl Hernández en sus mejores épocas (Cuando todavĩa estaba en
Caifanes).
Las cosas se ponen peor (y mucho más pretenciosas) en la canción
Girl y
Daphne, y no es por el abismal sentido lĩrico del autor (sobre el que profundizaré más adelante), si no por la completa falta de coherencia del vocalista para que se escuche algo más que murmullos al parecer provenientes de un adicto al crack bajo efecto de LSD mutágeno.
Describir
No te encuentro y
Bipolar es simplemente una continuación de lo expuesto hasta ahora. Una mezcla interesante de muchos sonidos viejos y actuales en música apta para la juventud actual. Cada canción tiene momentos interesantes, por ejemplo
No Te Encuentro con un
feeling mucho más progresivo, a la
The Mars Volta, salvo las texturas vibrantes de
De-loused at the Comatorium, y manteniendo simplemente la vibra psicodélica del grupo. No es malo que lo hagan, suena bien en conjunto, sin embargo, se necesita ser o muy estúpido para no ver las claras referencias, o de plano tener catorce años y tener como referencia de rock a Nirvana, como lo mencioné al principio de ésta reseña.
Lo único que salva a éste álbum son los dos interludios, cuyo sonido viene a eliminar las pretensiones histriónicas del cantante, dejando solo los instrumentos, de los que únicamente se rescata el trabajo del baterista para mantener los ánimos arriba (Cuyo estilo está marcado por bandas de Post Rock de los últimos años más que nada), y que hacen del trabajo en general interesante.
El sentido lĩrico de la banda intenta emular la psicodelia de los setentas de bandas como
Pink Floyd, con temas mundanos como el amor, el amor… y bueno. Las relaciones interpersonales. El Español es una lengua que no se presta a la frialdad de otras lenguas, digamos el Alemán o el Inglés, por lo tanto intentar hacer música lĩricamente interesente resulta en una tarea difĩcil, por lo que se tiene que recurrir a texturas mucho menos usuales que las que se utilizan para hablar de lo mismo, excepto claro con marcianos o cometas volando en las imágenes creadas.
En general, el EP suena como debe sonar un EP: Completamente falto de madurez, mal enfocado, una emulación de influencias, tonos de guitarra de lugar común, beats repetitivos y falta de
groove (léase ritmo para conservar la pureza del idioma) en el bajo, pero que probablemente funcionarĩan si la banda buscara un sonido propio y no sonar como suena la horrible escena de música independiente hoy en dĩa.
Sin embargo, el dĩa en el que desaparezca la horrible escena independiente tal vez sea momento de recluirme de vuelta a la música clásica.
- Tojes reviü crü